Guia oncosur de melanoma

> 51 5 Tratamiento adyuvante del melanoma Cynthia Daniela López Hervas, Isabel Fernández-Rañada Shaw, María Isabel Gómez Barreda de la Gándara y Javier Cassinello Espinosa C A P Í T U L O El tratamiento de elección para el melanoma cutáneo en etapas tempranas es la resección quirúrgica de la lesión primaria. La extensión de la cirugía depende del espesor afectado por la lesión. Para el melanoma en estadios I-IIIB, la cirugía es la piedra angular del tratamiento, con un control local óptimo si los márgenes quirúrgicos se encuentran dentro del rango de seguridad (Tabla I) (1,2). El objetivo de la resección quirúrgica es minimizar el riesgo de recurrencia, con un resultado funcional y cosmético adecuado. 1. MANEJO DE LOS GANGLIOS LINFÁTICOS Dado el riesgo sustancial de complicaciones posoperatorias y morbilidad a largo plazo, la linfadenectomía electiva se considera obsoleta. Desde la introducción de la biopsia selectiva del ganglio centinela (BGC) en 1992, es posible realizar una valoración previa antes de la resección completa (3). Se recomienda realizar la BGC en pacientes con melanoma con espesor de al menos 1 mm. Para las lesiones que miden menos de 1 mm de espesor, la probabilidad de afectación de ganglios linfáticos es menor del 10 %: se deberá realizar BGC si existen características histológicas de alto riesgo, tales como ulceración, número de mitosis mayor o igual a 1 mm2 o nivel de Clark IV o V (4). Si la BGC es negativa para metástasis por melanoma, no es necesaria la cirugía de los ganglios linfáticos regionales. Si la BGC es positiva para melanoma, se recomienda la linfadenectomía de la

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