

Ponencias
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cinas proinflamatorias (IL-1
β
y TNF-
α
), infiltración de neutrófilos
en el espacio perivascular y lesión histológica.
Angiogénesis
Diferentes estudios han descrito un papel de las MV en la
regulación de la angiogénesis
18
. Las MV derivadas de plaquetas
fueron las primeras implicadas en el proceso de angiogénesis, ya
que las plaquetas contienen al menos 20 factores de regulación de
la angiogénesis. Las MV de plaquetas estimulan la proliferación,
supervivencia, migración y formación de estructuras similares a
capilares en las células endoteliales
in vitro
. Además, la inyección
de MV derivadas de plaquetas aumenta la densidad capilar pos-
tisquémica miocárdica en ratas. Estudios posteriores han revelado
que las MV aisladas de las placas ateroscleróticas intervienen en
la formación de neovasos y en la progresión de las placas hacia
su rotura. Las células endoteliales en cultivo liberan MV que
contienen metaloproteinasas de matriz (MMP-2 y MMP-9), que
promueven la degradación de la matriz y la formación de nuevos
vasos sanguíneos.
Apoptosis
Además de ser un potente estímulo para la formación de MV,
la apoptosis también puede ser una consecuencia de la señaliza-
ción de MV
18
. Las MV derivadas de monocitos, eritrocitos, células
endoteliales y plaquetas contienen caspasa 3. Se piensa que el
contenido de caspasas puede ser un mecanismo dirigido al control
de la apoptosis, y se sugiriere que las MV liberarían la caspasa 3 en
las células diana, participando en la inducción de apoptosis. Ade-
más de la muerte celular, la caspasa 3 está implicada en numerosos
procesos celulares, por lo que la liberación de caspasa puede tener
un impacto todavía mayor sobre la célula diana.
Matriz extracelular
Las MV contienen enzimas proteolíticas, por lo que algunos
de sus efectos podrían atribuirse a alteraciones en la matriz extra-
celular o la escisión proteolítica de moléculas de señalización.
Por ejemplo, las MVE de la microvasculatura contienen MMP1,
MMP2, MMP7 y MMP13, que degradan la fibronectina
in vitro
.
Además, las MV aisladas de placas ateroscleróticas humanas
contienen una forma activa de ADAM17 (metallopeptidasa domi-
nio 17), una enzima con un importante papel en el control de la
inflamación y regeneración de tejidos. Esta enzima podría contri-
buir al desarrollo de alteraciones mediadas por MV en el entorno
extracelular y la liberación de citoquinas.
Regeneración vascular
Inicialmente, la proliferación y migración de células endotelia-
les adyacentes se habían identificado como un factor de reparación
endotelial; estudios posteriores describen un mecanismo para el
mantenimiento de la estructura endotelial que se asocia con la
capacidad de células progenitoras endoteliales circulantes (EPC)
para diferenciar y reparar el tejido endotelial dañado. Debido a la
importancia de este mecanismo de reparación daño-endotelial en
el mantenimiento de la homeostasis vascular, es lógico pensar en la
existencia de una estrecha comunicación entre las células endote-
liales dañadas y las EPC. Estudios previos realizados por nuestro
grupo indican que las MVE de plasma, tanto en sujetos sanos
como en pacientes con enfermedad renal crónica, participan sobre
la actividad de las EPC
13
. De hecho, la hipótesis que se plantea es
que las MVE pueden ser un importante y necesario mecanismo
fisiológico de señalización para iniciar el reclutamiento de células
reparadoras de endotelio desde la médula ósea. En modelos
in vitro
hemos demostrado que las EMV pueden ser un elemento clave
en la regeneración y mantenimiento de la homeostasis vascular
actuando sobre células EPCs
19
.
MVE y calcificación vascular
La calcificación vascular es un proceso cada vez más frecuente
en los países desarrollados y puede contribuir de manera impor-
tante a un incremento del riesgo cardiovascular. Los procesos y
mecanismos que participan en la formación de calcificaciones
vasculares son poco conocidos y es necesario desarrollar nuevas
estrategias terapéuticas para prevenir o revertir la calcificación.
Los pacientes con enfermedad renal crónica (ERC) tienen una
mayor frecuencia de calcificación vascular, y hemos demostrado
que las MVE se encuentran incrementadas en pacientes con un
mayor grado de calcificación
13
. Además, en estudios
in vitro,
las
MVE producidas en un entorno inflamatorio o que proceden de
pacientes con ERC promueven la calcificación de células de mus-
culo liso
in vitro
10
. Otros autores también han descrito un papel de
las MV en la mineralización de células de musculo liso vascular
20
.
Conclusiones y perspectivas
Las MVE se consideran actualmente biomarcadores de la
lesión endotelial y se asocian con un estado inflamatorio o pro-
trombótico. Sin embargo, las perspectivas se extienden más allá
de su papel como biomarcadores, ya que los estudios realizados
en MVE implican a estos elementos en una diversidad de eventos
celulares trasmitiendo información biológica en numerosos pro-
Figura 2.
Las microvesículas endoteliales (MVE) se originan a partir del
endotelio y comparten con las células que las originan características y
moléculas de membrana. Contienen diversas moléculas como proteínas y
microRNA que pueden ser transportadas y entregadas de forma segura
incluso en ubicaciones remotas, actuando como sistemas de señalización.